El método de clasificación de inventarios ABC es un sistema para segmentar y organizar los productos de un almacén en base a su importancia, relevancia para la empresa, valor económico, beneficios aportados, rotación generada, etc.
Con la clasificación ABC se pretende priorizar las mercancías de un almacén más importantes para la empresa como pueden ser los productos con mayor impacto en los beneficios de la empresa y las que mayor rotación suponen, en lugar de tratar a todas las referencias por igual o de organizarlas por su tamaño, peso o cantidad.
Origen y explicación del análisis ABC del stock
El origen del método ABC de gestión del stock proviene de la conocida como regla del 80/20 o principio de Pareto, según el que una pequeña parte del total de las cosas es la que contribuye a la mayor parte de la consecución de los resultados. Aplicando la regla 80/20 a la realidad de la empresa, un 20% del total de referencias, son las que generarían el 80% de los beneficios.
Extrapolando el principio de Pareto a la logística, resultaría en que en un almacén en torno a un 20% de las referencias de productos son las que generan el 80% de los movimientos del almacén y también de los ingresos de la empresa.
Utilizando este principio como base, se pueden seguir diversos criterios para organizar y priorizar esta parte más importante de la mercancía en función de las características de cada empresa.
El método de clasificación ABC utiliza este principio de Pareto para segmentar las mercancías de un almacén en 3 categorías (A, B y C) en base a su importancia según el criterio elegido, y de esta forma destinar más recursos a las referencias que son clave para la empresa, en este caso las elegidas en el grupo A.
Categorías de productos en el sistema ABC
Cómo no todos los productos del almacén nos aportan la misma rentabilidad e ingresos, no debemos destinar la misma cantidad de recursos a todos por igual.
A continuación, presentamos que tipo de referencias de producto se deben incluir en cada categoría A, B y C.
Productos de Categoría A
Según el sistema ABC, las referencias de la categoría A son los más importantes para la empresa. Son solo en torno a un 20% del inventario pero suponen la mayoría del movimiento habitual de almacén, con mayor rotación y también los que aportan en torno al 80% de los ingresos de la empresa.
Al ser la categoría de referencias prioritaria, la empresa deberá destinarle más recursos para llevar a cabo controles de stock más exhaustivos y complejos, y realizados de forma periódica y frecuente.
Cualquier problema en el inventario de los productos de la Categoría A, como escasez o ruptura de stock, supondrá importantes pérdidas a la empresa.
La ubicación de la mercancía categorizada como A en el modelo ABC deberá situarse en zonas de fácil acceso y cercanas a la zona de expedición, para agilizar el proceso de preparación de pedidos. Es muy importante tener claro esto para definir el layout del almacén y organizar correctamente todo nuestro stock.
Los productos de esta categoría se pueden almacenar en sistemas de almacenaje con acceso rápido y directo las unidades de carga, o en su caso en sistemas de almacenaje automatizados para optimizar los tiempos de carga y descarga de la mercancía.
Productos de Categoría B
Las referencias de producto categorizadas como B en la clasificación ABC son las que tienen una importancia y rotación moderada para la empresa. Generalmente suponen en torno al 30% del total de productos del almacén, y por norma, no suelen generar más del 20% de los ingresos de la empresa.
Al ser una categoría intermedia entre la A y la C se debe revisar periódicamente su estatus, valorando la posibilidad de que se convierta en una referencia de categoría A o C en el futuro.
El control de stock de esta categoría de productos también debe realizarse periódicamente, pero en menor frecuencia que los de categoría A que absorberán el grueso de la carga de trabajo en almacén.
Su localización en el almacén será en los lugares más accesibles y directos disponibles una vez hayamos organizado y reservado las mejores ubicaciones para las referencias A. Generalmente, los productos de categoría B se almacenan en niveles intermedios en los que el acceso es rápido pero no siempre directo a todas las unidades de carga.
Productos de Categoría C
Según el principio de Pareto que sigue el modelo ABC, las referencias de la categoría C serán las más numerosas, pero también las que menos ingresos aportan a la empresa. Pueden suponer más del 50% de las referencias de productos pero en términos de ingresos no alcanzar ni el 5% del total.
Su rotación en el almacén será muy baja, al ser referencias menos demandadas y por lo tanto son productos en los que se debe intentar reducir al máximo los recursos destinados a ellos.
El control de inventarios puede ser esporádico y con métodos simples, lo suficiente para evitar problemas de obsolescencia o caducidad, y su ubicación en el almacén será la de los puntos alejados de la zona de expedición, y en los niveles superiores o con peor accesibilidad.
Con las referencias de categoría C se debe realizar una valoración para estudiar si merece la pena destinar recursos de la empresa a su almacenaje y stock, ya que puede darse la situación de que los costes derivados de su almacenaje sean superiores a la rentabilidad obtenida con su comercialización.
¿Cómo clasificar la mercancía en el método ABC?
Existen diversas formas de clasificar o definir la importancia de un producto para la empresa en función del sector, tipología de productos o necesidades concretas del almacén.
No hay una clasificación idónea universal, si no que habrá que elegir la clasificación adecuada a las circunstancias de cada negocio. Las 4 principales formas de clasificar las referencias de productos en el sistema ABC son:
Clasificación de productos ABC por rotación
Con este método de clasificación de categorizan los productos en A, B y C en función de la rotación de estos productos en el almacén.
Los productos que sean más demandados y por tanto más movimientos generen en el almacén serán de categoría A, y los que apenas tengan rotación serán categoría C.
Clasificación de productos ABC por coste unitario
En la clasificación por coste unitario se ordenan las referencias de productos por la inversión que se realizar en cada una de ellas. Si un producto tiene un coste muy elevado se categoriza como A, si su coste es reducido su categoría en el modelo ABC será la C.
Es una clasificación interesante en empresas cuyo inventario cuenta con productos con costes muy diferentes entre sí.
Clasificación de mercancía ABC por valor total de inventario
En este caso, no se tiene en cuenta el valor unitario de cada producto, si no el valor del total de las unidades almacenadas de cada referencia, es decir, coste unitario multiplicado por el número de unidades.
Es un sistema que puede ser útil, pero que requiere un control continuo del stock para redefinir las categorías A, B y C cuando haya actualizaciones en las salidas y entradas de mercancía del almacén, por lo que es un método de clasificación complejo.
Clasificación de referencias ABC por utilización y valor
La clasificación por utilización y valor es el método más utilizado y también el más completo por tener en cuenta tanto el valor de los productos como su demanda.
Este método aúna las ventajas de las clasificaciones anteriores combinando valor y rotación de la mercancía.
Para ser categorizado como A, un producto debe tener un alto valor para la empresa y además ser muy demandado y por tanto tener mucha rotación en el almacén.
Para hacer este sistema más completo y complejo se pueden incluir en la ecuación variables como la rentabilidad del producto.
Ventajas y beneficios del método ABC en un almacén
Teniendo en cuenta todas las características planteadas de este sistema parece claro que es un método de gestión de inventarios interesante y que implementado correctamente conllevará grandes beneficios para la empresa.
Las principales ventajas de aplicar el método ABC de clasificación del stock en un almacén son las siguientes:
Facilita la gestión y la operativa del almacén
Con el sistema ABC se da prioridad y mejor ubicación en el almacén a aquellos productos que más carga de trabajo suponen en el almacén, por lo que al agilizar los procesos operativos de estos productos principales la gestión diaria del almacén se vuelve más ágil y menos caótica.
Los operarios tienen claro en que tienen que productos deben centrar sus esfuerzos, y estos productos además están almacenados de forma más directa y accesible por lo que aumenta la productividad.
Mayor control del stock
Las exigencias de control de inventarios que implica la puesta en marcha del método ABC, favorece que haya un mejor control del stock del almacén.
Además, este control de stock será más exhaustivo en los productos de categoría A, que a su vez serán los que tengan un mayor peso en el inventario total.
Reducción de los costes
Con el método ABC se priorizan los productos más relevantes para la empresa, y por tanto se centran en ellos los esfuerzos y recursos de la compañía.
Por lo tanto, una vez se categoricen los productos A, B y C, se podrán optimizar los costes de los productos menos importantes. Por ejemplo, reduciendo el stock de seguridad de la mercancía B y C.
Servicio más eficiente
Esta reorganización de los recursos del almacén y la empresa, centrada en los productos prioritarios permite una mejora notable del servicio, posibilitando mejores plazos de entrega, más agilidad en la preparación de pedidos y reducción de incidencias.
Sistemas de almacenaje en el método ABC de inventarios
Las características del método ABC para la gestión del stock otorgan a los sistemas de almacenaje y a las estanterías industriales del almacén un papel importante ya que serán los responsables de gran parte de la correcta organización de la mercancía.
Como la clasificación ABC distribuye los productos en 3 categorías distintas, se recomienda contar en el almacén con sistemas de almacenaje diferentes que se puedan adaptar a las necesidades de esas 3 categorías.
Como ya ha quedado claro, se priorizarán las existencias de la Categoría A y por tanto el almacén necesitar tener para estos productos un sistema de almacenaje que facilite la ágil carga y descarga de los productos y en el que el acceso a las unidades de carga sea sencillo.
Uno de los sistemas de almacenaje que se adapta bien a estas características es el sistema semiautomático AR Shuttle para pallets, que es un tipo de estantería compacta de alta densidad que utiliza carros satélite para el transporte de las unidades de carga en el interior de las estanterías.
De esta forma se agiliza la carga y descarga ya que la carretilla elevadora no debe introducirse en el interior del sistema de almacenaje.
También es recomendable que los sistemas de almacenaje instalados sean versátiles y adaptables ante diversas necesidades del almacén, ya que en el método ABC puede haber cambios entre las categorías de los productos que exijan reorganizar el almacén de forma periódica.
Como sistema de estanterías versátil podemos destacar las estanterías convencionales para pallets que pueden ser adaptadas y ampliadas con facilidad y además pueden ser combinadas con sistemas de almacenaje dinámicos.
Sin embargo, al igual que en el caso de los tipos de clasificación de productos ABC, no existe un sistema de almacenaje perfecto para todos los almacenes por lo que es recomendable estudiar todas las necesidades del almacén caso a caso.
Si necesitas asesoramiento para elegir el mejor sistema de almacenaje para las necesidades de tu empresa, contacta aquí con nuestro equipo de AR Racking Perú.