El rendimiento del almacén depende en gran medida del sistema de almacenamiento que se instale, pero no todas las soluciones de almacenaje son válidas para todas las empresas, productos y/o procesos. A continuación, nos centraremos en las soluciones de almacenaje de con acceso directo a las tarimas o unidades de carga.
Cuando las mercancías se disponen sobre una tarima para su almacenaje, estamos hablando de paletización. La paletización es uno los procedimientos más utilizados para homogeneizar la carga en los almacenes y centros logísticos. La tarima facilita el manejo, tratamiento y transporte de las mercancías mediante montacargas.
Ventajas del almacenamiento para tarimas
La paletización se ha convertido en un procedimiento con gran protagonismo en la logística y el transporte de las mercancías. Facilita la agrupación de las mercancías, mejora su manejabilidad y permite, además, gestionar números de unidades elevados.
Dicho de otro modo, la paletización ayuda sobremanera en la uniformidad de las existencias a lo largo de la cadena de suministro. La manipulación de las mercancías suele efectuarse mediante carretillas u otros medios de manutención.
Las principales ventajas de la paletización son:
- Disminuye los tiempos de preparación.
- Disminuye los tiempos de carga y descarga y, por tanto, minimiza costes.
- Se favorece la menor manipulación de los productos.
- Ayuda en la optimización del espacio del almacén.
- Favorece la rotación de stock.
- Aporta seguridad en el manejo de las mercancías.
- Localización rápida de las mercancías.
Las cargas paletizadas necesitan almacenarse sobre rack metálicos industriales, que ofrecen garantía de resistencia y regulación de los niveles de carga para ajustarlos a los volúmenes precisos de las existencias.
Sistemas de almacenamiento de acceso directo a tarimas
Si bien hemos mencionado la paletización como método estándar para el almacenaje y transporte de mercancías como una única unidad, no en todos los racks metálicos industriales se puede acceder de forma directa a las tarimas y, por tanto, a las existencias del almacén. Hay sistemas de almacenaje industrial por compactación, cuya característica principal es la máxima optimización del espacio, pero sin un acceso inmediato y directo a las tarimas.
Veamos cuáles son los sistemas de almacenaje para tarimas que permiten un acceso directo a la unidad de carga:
Rack selectivo simple:
Los sistemas selectivos para tarimas son los racks para carga industrial por excelencia. Utilizan como soporte de la unidad de carga la tarima. El acceso es directo y se realiza a través de pasillos estructurados a cada lado del módulo del rack.
Es la solución más universal, en gran medida, debido a la posibilidad de tener acceso directo a cada una de las tarimas almacenados.
Se trata de un sistema muy versátil, que permite una sencilla regulación de los niveles de carga para adaptarse a cualquier tipo de mercancía en peso y volumen. Asimismo, se caracteriza por ser una solución de paletización eficaz, resistente y de fácil montaje.
El sistema rack selectivo puede ser de simple fondo o de doble fondo, pero éstas últimas sólo permiten el acceso directo a la tarima delantera. La elección de una modalidad u otra dependerá de la cantidad de tarimas de la misma referencia o del flujo de entrada/salida de la mercancía.
En función del equipo de manutención y de los montacargas, se pueden diferenciar dos configuraciones:
- Sistema industrial de rack selectivo de Clase 400: pasillo ancho.
- Sistema APR Clase 300 o Sistema VNA (Very Narrow Aisle) para montacargas de pasillo muy estrecho.
Por otro lado, los racks selectivos con acceso directo a las tarimas disponen de numerosos accesorios y elementos opcionales que se adaptan a todo tipo de necesidades de almacenamiento.
Racks móviles con acceso directo a la carga:
En este caso, el rack selectivo simple, con acceso directo a las unidades de carga paletizadas, va montada sobre un chasis que permite el movimiento de los módulos del rack. Los estantes se desplazan de un lado y a otro por los carriles fijados en el suelo para abrir un único pasillo de acceso del montacargas. Así pues, sólo se habilita el pasillo de trabajo al que se necesita acceder en cada momento, pero se mantiene el acceso directo a todas las unidades de carga.
La apertura del pasillo de trabajo al que se quiere acceder se realiza por medio de motores eléctricos situados en la base del rack. El operario es el encargado de dar la orden de apertura del rack móvil a través del mando a distancia para que luego el montacargas tenga acceso directo a las tarimas.
Se aprovecha al máximo cada centímetro de la instalación y es una alternativa idónea cuando la superficie es reducida.
En definitiva, se trata de una solución híbrida puesto que permite la compactación del espacio, pero al mismo tiempo, posibilita el acceso directo a la tarima.
Rack automatizado con acceso directo a las tarimas:
Se trata de la automatización del rack selectivo. En este caso, en lugar de los montacargas se utilizan transelevadores u otros mecanismos robotizados para el acceso directo a las unidades de carga. La densidad de almacenamiento es alta gracias a la reducción de pasillos y el espacio en altura se aprovecha al máximo, pero se mantiene la característica del acceso directo a las tarimas.
La inversión económica inicial es mayor que si se opta por el sistema de rack selectivo, pero se reducen los medios técnicos y humanos para acceder a las tarimas, la productividad es mayor y el manejo de las mercancías se produce con mayor agilidad. Así pues, el retorno de la inversión es relativamente inmediato.
Los almacenes automáticos para tarimas son a menudo racks autoportantes, cuya característica principal es que el rack forma parte de la estructura del edificio.
Más información sobre todos los racks metálicos para tarimas.