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Etiquetado de mercancías en el almacén: claves

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A lo largo de su paso por el almacén, las mercancías son objeto de numerosas operaciones logísticas. Sin embargo, muchas de estas operaciones serían imposibles de realizar sin el etiquetado de las mercancías, que tiene lugar nada más entrar en el almacén.

Esta importante etapa de la cadena de suministro consiste en asignar datos precisos y únicos a las mercancías mediante una etiqueta equipada con un código de barras, tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia), tecnología de tinta electrónica, etc. El etiquetado permite asignar información precisa a cada mercancía, lo que es importante para el buen funcionamiento del almacén y, por tanto, de la empresa en general.

Empecemos por explicar los distintos tipos de etiquetas que pueden utilizarse en los almacenes.

Los distintos tipos de etiqueta

La etiqueta del código de barras

La identificación de mercancías por código de barras es el método más utilizado para etiquetar la mercancía en los almacenes. Esta solución sencilla y eficaz consiste en pegar una etiqueta autoadhesiva con un código de barras en el embalaje de la mercancía o directamente en la propia mercancía. Basta con leer el código de barras con un escáner adecuado para poder acceder a la información sobre la mercancía.

Existen diferentes tipos de códigos de barras:

  • Los códigos de barras 1D están formados por barras y números. Pueden almacenar una pequeña cantidad de datos y pueden ser leídos rápidamente por todo tipo de lectores de códigos de barras, incluso a distancia. Son una solución eficaz y sencilla para las empresas que no necesitan acceder a una gran cantidad de información. Sin embargo, hay que tener cuidado de que su superficie no se deteriore, pues de lo contrario dejarán de ser legibles y no se podrá acceder a dicha información.

  • Los códigos de barras 2D están formados por cuadrados y otras formas geométricas. Es un etiquetado más avanzado que los códigos de barras 1D y pueden almacenar mucha más información. Además de letras y números, pueden contener imágenes, enlaces, etc. Son una solución ideal para las empresas que necesitan acceder a una gran cantidad de información en una superficie pequeña. Asimismo, su superficie puede degradarse parcialmente sin que dejen de funcionar, gracias a su función de corrección de errores. Sin embargo, requieren una inversión en lectores de códigos de barras compatibles con 2D, que son más caros que las versiones 1D. 

 La etiqueta RFID

También es posible utilizar etiquetas equipadas con tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia), también conocidas como etiquetas RFID, para etiquetar mercancías en su almacén.

Mediante un lector RFID, el operador envía una señal de radio a la etiqueta RFID y esta captará esta señal con su antena, que responderá con otra señal de radio, proporcionando los datos contenidos en el chip RFID de la etiqueta.

Esta tecnología ofrece una serie de ventajas:

  • Puede transmitir una gran cantidad de información, superior a la de los códigos de barras 1D y 2D.
  • Esto puede hacerse a distancia, desde unos 25 centímetros para los lectores de proximidad hasta unos diez metros para los lectores de largo alcance.
  • Puede utilizarse sin contacto visual con la etiqueta.
  • Dependiendo del chip RFID de la etiqueta, los datos pueden modificarse, por lo que la misma etiqueta RFID puede reutilizarse varias veces.
  • Permiten rastrear las mercancías.
  • Pueden combinarse con el software del sistema de gestión de almacenes (SGA) para crear un sistema de inventario permanente. He aquí nuestro artículo para saber más sobre esta innovadora forma de gestionar las existencias.

Sin embargo, las etiquetas RFID son más caras de adquirir que las etiquetas de códigos de barras y deben utilizarse con el software adecuado. Por tanto, representan una inversión para las empresas que hay que tener en cuenta.

 

La etiqueta electrónica o e-ink

Las etiquetas electrónicas, también conocidas como etiquetas de tinta electrónica, consisten en una pequeña caja equipada con una pantalla animada por tinta electrónica. Este tipo de etiqueta, ya muy utilizado en tiendas y supermercados, también puede utilizarse para etiquetar mercancías en el almacén.

Esta etiqueta electrónica permite:

  • Visualizar toda la información de un vistazo.
  • Cambia su visualización en cualquier momento y se conecta de forma inalámbrica a un software para actualizar a tiempo real la información que proporciona.
  • Reducción de los errores de etiquetado.
  • Se pueden añadir instrucciones de seguridad a la etiqueta.
  • Permite cambiar el contenido de las etiquetas de forma rápida y sencilla.
  • Se pueden reutilizar muchas veces y ahorrar papel, lo que fomenta la logística ecológica, un negocio importante y en crecimiento. ¡Te invitamos a leer nuestro artículo sobre este tema para saber más!

Sin embargo, la etiqueta electrónica no puede proporcionar una gran cantidad de información cuando se lee a simple vista, ya que el tamaño de su pantalla es limitado. Para aumentar la cantidad de información disponible, es posible programar la visualización de un código QR o un código de barras. Además, estas etiquetas pueden representar una inversión excesiva para las empresas, ya que su adquisición es más costosa que la de las etiquetas con códigos de barras.

Existen distintos tipos de etiquetas que pueden utilizarse para etiquetar mercancías en un almacén. A continuación, se explicará qué información sobre las mercancías se pueden transportar.

Información proporcionada por las etiquetas

En función de los distintos requisitos logísticos y del equipamiento del almacén, las etiquetas pueden transmitir diferente información sobre cada artículo.

Esta información puede incluir:

  • La localización de las mercancías en el almacén, lo que facilita y agiliza las operaciones logísticas, ya que el operario sabe inmediatamente dónde está el producto. Asimismo, permite el seguimiento y localización de los productos.
  • Dimensión y peso de la mercancía.
  • La fecha de llegada al almacén.
  • Fecha de embalaje.
  • Fecha de caducidad.
  • Instrucciones de seguridad. Si le interesa la seguridad en los almacenes, le invitamos a leer nuestro artículo sobre señalización en almacenes para obtener más información.
  • El precio de la mercancía.
  • La composición de la mercancía. Puede saber lo que contiene una caja sin tener que abrirla, lo que le ahorra mucho tiempo.
  • Un número identificador único asignado a cada artículo para reconocerlo claramente.
  • El número de serie.

En conclusión, el etiquetado de las mercancías en el almacén es una parte importante de la cadena de suministro, ya que ofrece numerosos beneficios y puede aumentar la eficacia del almacén cuando se realiza correctamente. Por lo tanto, es importante adaptar el etiquetado de las mercancías a las necesidades logísticas de cada empresa y, por lo tanto, elegir cuidadosamente el tipo de etiquetas utilizadas.