El acero es un material indispensable en nuestro día a día. Se trata de un material que se encuentra en casi todos los elementos que manejamos y visualizamos cada día: desde automóviles hasta las latas de comida, pasando por grandes edificaciones o almacenes.
En el sector de los sistemas de almacenaje industrial, el acero es la materia prima clave de la que dependerá en buena medida el correcto funcionamiento de la instalación.
Principales propiedades del acero
¿Por qué el acero es un material tan apreciado? Su composición lo convierte en un material muy preciado entre toda clase de sectores. Y es que no hay que confundir hierro y acero. El acero es una aleación de hierro con una cantidad variable de carbono.
El acero conserva las características metálicas del hierro en estado puro, pero el hecho de añadirle carbono y otro tipo de elementos tanto metálicos como no metálicos mejora sustancialmente las propiedades del hierro.
Tanto el hierro como el carbono se encuentran en altas cotas en la naturaleza y por lo tanto, se trata de un material con elevado grado de disponibilidad. No obstante, la alta tecnología empleada en el proceso de producción del acero hace que sea un material estratégico que aún muchos países no son capaces de producir con calidad.
Así pues, el acero es un material con unas características muy apreciadas en infinidad de sectores: resistencia, plasticidad y versatilidad. Pocos materiales logran igualar la contribución al desarrollo industrial y tecnológico de las sociedades como lo hace el acero.
Tipos de acero
Además de carbono, el acero puede contener otros elementos químicos aleantes, entre los que se pueden destacar, entre otros: el manganeso, el cromo, el níquel, el silicio o el molibdeno. La combinación de estos elementos en distintos niveles puede variar las propiedades del acero.
De este modo, el acero no es un único producto, puesto que según datos WorldSteel Association, “existen más 3.500 grados diferentes de acero con muchas propiedades físicas, químicas y ambientales diferentes”.
En función de los metales que componen el acero, se conseguirán diferentes grados en propiedades como la dureza, la resistencia a la corrosión, la templabilidad etc.
La principal división se hace en función del equilibro de la composición entre el hierro y el carbono:
Acero al carbono o de construcción
Constituye una proporción importante de los aceros producidos en las plantas siderúrgicas. Se engloban tanto los aceros para construcción civil como para construcción mecánica.
Nueve de cada diez aceros de la producción mundial corresponden a aceros al carbono y el restante son aceros aleados.
Acero de aleados
Todo acero es en realidad una aleación, pero no todos los aceros son aceros aleados. Los aceros más simples son principalmente hierro en un 99% con carbono.
El acero aleado es el término estándar referido a aceros con otros elementos además del carbono, que típicamente son el manganeso, níquel, cromo, molibdeno, vanadio, silicio, y boro.
Dividido el acero en esos dos grandes grupos, también se puede clasificar el acero en otros grandes subgrupos dependiendo de diferentes factores:
Acero corten
Aleación que está formada por cobre, cromo, fósforo y níquel. Se trata de un tipo de acero muy resistente a la oxidación. Utilizado principalmente en la industria cementera.
Acero corrugado
Es un acero laminado en forma de barra, compuesto por hierro y carbono. Tiene unos resaltos o corrugas, que sirven para mejorar su adherencia con el hormigón. Se utiliza en proyectos de construcción para crear estructuras de hormigón armado.
Acero inoxidable
Está compuesto de cromo, hierro y carbono. Según la aleación puede también contener otros componentes. Destaca sobre todo por su gran resistencia a la corrosión y durabilidad. Utilizado en múltiples ámbitos del día a día.
Acero intemperizado
Es acero estructural con una resistencia a la corrosión atmosférica mejorada. Estos aceros son aceros de baja aleación de alta resistencia que, en condiciones atmosféricas normales, ofrecen una mayor resistencia a la oxidación en comparación con los aceros al carbono al manganeso ordinarios.
Esta clase de acero adquiere una capa de óxido en su superficie cuando es expuesto a las lluvias y a la humedad.
Acero galvanizado
Consiste en un recubrimiento del acero base por medio de una capa de zinc. Se trata de un tipo de acero más resistente, dispone de un acabado más duradero y cuenta con una protección contra la corrosión.
Debido a estas características, se convierte en un producto atractivo y solicitado para la fabricación de una serie de componentes para la industria automotriz, construcción, y cómo no, las estanterías industriales tanto para interior de almacén como para estanterías industriales de exterior de almacén.
Acero para estanterías metálicas industriales: acero galvanizado
Como se indica en el párrafo previo, galvanizar es la inmersión del acero en zinc fundido a una temperatura de unos 450º. Esto provoca una reacción electroquímica que dota al material de una mayor protección frente a la corrosión y las condiciones ambientales extremas. Este producto, además, destaca por ser un metal recubierto duradero resistente a raspaduras. Por otra parte, tiene un aspecto satinado. Una de las grandes propiedades del acero galvanizado es la durabilidad.
En el caso de los racks o estanterías metálicas industriales, el conocimiento de la materia prima, el acero galvanizado en este caso, es clave porque proporciona la base para utilizar la calidad adecuada de materia prima a cada producto que pueda conformar un sistema de almacenaje completo.
Ventajas de un buen acero galvanizado en estanterías industriales
En los últimos años, el sector del acero ha vivido tiempos convulsos. Durante años ha habido un auge de acero low cost proveniente de oriente, con el que los principales países y productores occidentales han tenido dificultades para competir en términos de precio. Sin embargo, el tiempo ha demostrado que el bajo coste del acero del gran gigante asiático no era simplemente una cuestión de enorme capacidad productiva, sino de una producción de acero de baja calidad.
Este acero de baja calidad, generalmente hecho de materiales desechados, ha resultado siendo contraproducente y como consecuencia, más caro, debido a las reparaciones o las sustituciones que se han tenido que llevar a cabo en aquellos almacenes o centros de distribuciones con estanterías industriales de acero de menor calidad.
¿Qué proporciona un buen acero galvanizado en los sistemas de almacenaje?
- Resistencia: el acero galvanizado de calidad cuenta con un recubrimiento de zinc muy resistente a golpes y a la abrasión. Se trata de un acero mucho más resistente a la oxidación y al deterioro provocado por las condiciones ambientales.
- Durabilidad: las estanterías industriales hechas de un buen acero galvanizado tienen una vida útil más larga. Puede afirmarse que el acero galvanizado es el recubrimiento que asegura la mayor durabilidad bajo cualquier tipo de ambiente externo. Según la Asociación Técnica Española de Galvanización (ATEG), “un recubrimiento galvanizado de 80 micras de espesor puede durar hasta 100 años en ambiente rural, 40-100 años en ambiente urbano, 20-40 años en ambiente industrial y 10-20 años en entorno marino”.
- Coste cero de mantenimiento: en comparación con los sistemas con un acabado de pintura, la galvanización supone costes muy inferiores a lo largo de la vida en servicio del acero porque no precisa de ningún tipo de mantenimiento, por lo que el precio que se paga es tremendamente competitivo.
- Sostenibilidad: el impacto medioambiental del acero galvanizado es bajo por doble motivo: su larga vida útil hace que no haya una producción constante y excesiva de acero destinado a ser reparado o sustituido; y además, se trata de un material fácilmente reciclable.
- Seguridad: el proceso de producción del acero galvanizado está totalmente estandarizado mediante normas nacionales e internacionales, por lo que las estanterías industriales hechas de un buen acero galvanizado, que haya cumplido con todas las normativas y cuya materia prima sea de calidad, son una estructura absolutamente fiable.
- Versatilidad: el acero galvanizado es un material adaptable por dos principales motivos: por un lado, permite un acabado con pintura; por otro lado, las estructuras galvanizadas pueden ser soldadas o atornilladas, reduciéndose así los tiempos de construcción.
Por último, y aunque no menos importante, los fabricantes de rack o estanterías industriales de máxima calidad como AR Racking, además de contar con una materia prima de calidad gracias a la pertenencia a un grupo siderúrgico con más de 80 años de experiencia en el sector como Grupo Arania, ejecutan un proceso de producción de estanterías industriales sujeto a parámetros de excelencia en la fabricación de sus soluciones de almacenaje.
Si estás valorando sustituir las estanterías industriales dañadas de tu almacén o instalar nuevos sistemas de almacenaje de larga duración, contacta aquí con AR Racking.
